martes, octubre 03, 2006

Escalofríos.


Hay algunos momentos en que la noche sube como un cuchillo afilado por la espalda. Recuerdo una noche muy cerrada en el lago escondido. Con Guido, Lucas y Chuquy. Por unos segundos tuve esa sensación, al momento desapareció con los primeros acordes de la guitarra, con guido en la bateas.

3 comentarios:

toti spi dijo...

javi, creo que tenès que dejar de chupar los pinceles para acomodarles la punta..han de tener restos de algùn alucinògeno como el que toma Fistringui.Atenti!
O serà la falta de sal?

guido dijo...

La pendiente cerrada sin brillo entre los arrayanes. La luna no arrimaba un color y en el muelle eramos cuatro, una guitarra y dos botellas de vino. Todo sobre el agua negra. Cerrazon y un murmullo extraño que picaba en los oidos. Lago Escondido, medianoche sin luna

Anónimo dijo...

Esas noches solo se dan en lugares como el lago escondido, en donde ninguna bocina, ninguna puteada, puede golpearte la cabeza, solo el viento y el agua ,pura energia. El momento para entender muchas cosas.